Es fundamental que todos comprendan la importancia del autocuidado por medio de los principios, conceptos y claves de la longevidad. Al partir desde este punto, todas las terapias que se puedan aplicar son complementarias, en el sentido de que son capaces de reforzar cualquier intento de mantenerse biológicamente joven y saludable.

Las terapias antienvejecimiento se basan en los procesos bioquímicos y fisiológicamente orgánicos que estimulan, modulan o inhiben el metabolismo celular, ya sea para eliminar o fabricar una sustancia que deba ser metabolizada, dándole al cuerpo lo que le falta o eliminando lo que le sobra, con el fin de activar la farmacia interna, que no es más que los propios mecanismos homeostáticos que regulan al organismo, al utilizar los sustratos, materia prima, catalizadores e inductores involucrados en el metabolismo específico para que cumpla con su función.

Las 4R Antivejez son las siguientes

Remoción: Elimina lo que te sobra

Las homotoxinas son moléculas de desecho orgánico o inorgánico, generadas por el propio organismo o que ingresan por alguna vía al cuerpo humano. Al hacerlo inmediatamente se activan los mecanismos de detoxificación y desintoxicación que buscan detectar, neutralizar, aislar, movilizar y eliminar las toxinas, a través de las vías correspondientes según su naturaleza, las cuales pueden ser físicas, químicas, biológicas, orgánicas e inorgánicas (Ernst& Schmidt 2004).

Las principales terapias de remoción están enfocadas en tratar de una manera efectiva las siguientes formas de homotoxicosis:

  • Oxidación
  • Acidez
  • Caramelización
  • Calcificación
  • Contaminación

Revitalización. Recupera lo que te hace falta

Las terapias de revitalización consisten en aportar al organismo lo que le hace falta para recuperar su metabolismo normal, mantener o incluso optimizarlo a escalas superiores, según la necesidad de cada persona, tales como la experimentación de altos niveles de estrés, el entrenamiento intensivo, una preparación quirúrgica o estados de convalecencia después de una enfermedad.

Al determinar cuál es el metabolismo que se debe revitalizarse seleccionan los sustratos, minerales, oligoelementos, vitaminas, fitofármacos, inductores enzimáticos, entre otros, para reactivar su funcionamiento y recuperar, mantener u optimizar la salud (Guarente 2011).

Regeneración. Revertir las lesiones

Estas terapias están destinadas a regenerar sistemas, aparatos, órganos o tejidos que han entrado en una fase degenerativa, dado que han perdido su capacidad de recuperarse por sí mismos y ameritan un tratamiento específico para restaurar su función o su estructura (Mason Dunnill 2008).

Las terapias más reconocidas en Medicina Regenerativa son:

  • Terapia Celular Hidrolizada: extractos de tejidos embrionarios de animales sanos de laboratorio, que aportan biomoléculas prefabricadas complejas y completas para la regeneración de la función del órgano tratado (Hernández Ramírez 2006).
  • Terapia Celular Liofilizada: células deshidratadas de tejidos embrionarios de animales sanos de laboratorio, que provee material celular completo a los órganos tratados (Hernández Ramírez P 2006).
  • Terapia de Factores Autólogos: proveniente de las plaquetas del propio paciente e infiltradas en los tejidos degenerados para estimular su regeneración (Copeland et al.1990).
  • Terapia de Células Madre: provenientes de la placenta, el cordón umbilical de recién nacidos o de la médula ósea, grasa o cualquier otro tejido del propio paciente, con el fin de sembrar una nueva población celular en el órgano en estado de degeneración (Fehrer & Lepperdinger 2005).

La aplicación se hace sistémica o segmentaria según el paciente, buscando prevenir, mantener o revertir cualquier enfermedad degenerativa.

Restauración. Mantente joven, saludable y en forma

El cultivo de las claves de la longevidad se basa los tratamientos que se indican a todos aquellos que han logrado mejorar su edad biológica, de forma tal que no dependan de los tratamientos complementarios anteriores, sino que cuiden su salud de manera óptima, con toques técnicos periódicos que le permitan contrarrestar el fenómeno normal de envejecimiento.

Podemos recordar las Claves de la Longevidad 5A:

  1. Alimentación sana
  2. Actividad física regular
  3. Asuteo, recreación periódica y descanso reparador
  4. Actirtud mental y emocional proactiva
  5. Ambiente armónico

Todo ello adaptado a las necesidades individuales y siguiendo las recomendaciones del médico antienvejecimiento de confianza.